Mi abuelo luchó en el Parque Lineal

Parte de los asistentes a la excursión frente a los restos de la Casa del Yeso, en el Parque Lineal del Manzanares

Lucía es una vecina de VillaVerde que quiso interesarse por la historia que el Parque Lineal encierra en la dejadez de su abandono. Lucía contemplaba los mapas, miraba los restos, escuchaba con ojos atentos las historias de los expertos… Los formalismos se relajaban mientras aumentaba el calor del tú a tú, cesaban los flashes de las cámaras y el numeroso público que acude a la presentación de la Ruta sacia apetito con el buen yantar del que Gefrema hace obsequio, Lucía se acerca y nos dice «…Mi abuelo luchó en el Parque Lineal…«.

Sea quizá ese, tal vez, el mejor resumen de nuestro trabajo. La absoluta constatación de dos hechos. El primero, innegable, que el patrimonio histórico que esconde el Parque Lineal del Manzanares es enorme y especialmente singular. El segundo, para que todos tomemos buena nota, que ese patrimonio traspasa su importancia intrínseca para convertirse en importante para la gente. Este último era nuestro objetivo y sin ningún lugar a dudas hoy podemos decir, objetivo conseguido.

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Al día siguiente, Lucía Berdasco estaba de las primeras en la estación de VillaVerde Bajo. Cerca de cien personas decidieron madrugar un domingo de elecciones para recorrer quince kilómetros y pisar las mismas tierras que en su día hiciera el miliciano Luciano, abuelo de Lucía. El esfuerzo era grande, pero la oportunidad era única y especial, con cierto encanto.

La historia ni acaba ni empieza en nosotros, somos simples actores de una enorme representación que continúa desde el comienzo de los tiempos, tiempos que dejaron su firma en esta parte de la cuenca baja del río Manzanares. No somos pocos los que entendemos este hecho, sútil y quizá por ello menospreciado, pero una nutrida representación de personas que piensan así, nos acompañaron en lo que ya podemos llamar como la «Primera Ruta por los restos de la Guerra Civil del Parque Lineal del Manzanares«. Una ruta que marca un antes y un después en la retorcida historia del Parque Lineal.

La presentación de la ruta

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A la presentación del viernes día 5 de junio acudimos más de treinta personas que nos dimos cita en el local de la Asociación del Espinillo. El acto, sumamente distendido, gozó no obstante de la formalidad que impone el Gefrema en este tipo de convocatorias. José Ignacio Bazán presentó el libro que esta Asociación ha editado para el eventó explicando los hechos históricos más relevantes que ocurrieron en la zona durante la Guerra Civil Española. Ángel Jimenez, también miembro de esta Asociación, colaboró tanto en la organización de la charla como en la documentación previa. Tras ellos, yo mismo, Vicente Núñez, tuve el gran placer de presentar la ruta y comentar cada uno de los hitos destacables que podríamos encontrar en ella.

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Abierto el turno de preguntas, y perdida la rigidez del primer contacto, las aportaciones y cuestiones de los asistentes fueron múltiples, lo que enriqueció la exposición con nuevos datos históricos y experiencias personales de todo tipo.

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Comida, bebida y música de la época nos acompañaron después en la exposición de fotografías, mapas, restos y maquetas. De los neardentales que poblaron el Parque Lineal hasta la vida del miliciano que vivió entre las trincheras, la historia que nos ofrece la cuenca baja del Manzanares pudo ser literalmente tocada por los asistentes.

La ruta senderista

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Con el sábado como único día de descanso, el domingo, a las nueve en punto de la mañana sale una comitiva de casi cien personas. La sorpresa entre los organizadores no fue pequeña. La espectación era máxima, todos querían ver lo que la historia nos dejó en el Parque Lineal. Nadie volvería defraudado. Personas octogenarias con ricas historias de VillaVerde y de la Guerra, mujeres y hombres de todo tipo y condición, e incluso niños y jóvenes de indudable valentía, acudían con pasmosa puntualidad a una cita que a ellos se les antojaba importante.

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Bajamos por la calle Vicente Carballal y en cinco minutos estábamos en el mismísimo corazón del Parque Lineal. Cruzando el río llegamos a la Casa de la Cuarta Esclusa, donde tenemos el placer de hacer una exposición sobre el Real Canal del Manzanares, la navegación que inició Carlos III y que concluyera Fernando VII, monarca este que precisamente instalara una residencia de recreo en esta misma Casa.

Las ansias de saber se hacían patentes en las preguntas del público, ¿fue navegable el manzanares? ¿venía Fernando VII al Parque Lineal? ¿por qué no se recuperan los restos que quedan? Se imponía detenernos en la Quinta Esclusa, y así hicimos, donde continuamos explicando el funcionamiento de la obra hidráulica y como fue desbancada por el ferrocarril en 1.851.

Los asistentes escuchando las explicaciones junto a los restos de la Quinta Esclusa del Real Canal del Manzanares

 A lo lejos se oteaba ya la imponente silueta del cerro que guarda los restos del poblado Carpetano de la Gavia. Cortado por las vías de los trenes de alta velocidad, parece desangrarse por los túneles defensivos que la Guerra Civil Española impusiera en la zona. Colgados, como hornacinas de un tiempo pasado, las cuevas que los milicianos excavaran en La Gavia, sesgadas al igual que el propio poblado prerromano por el desarrollo imparable de la alta velocidad, nos anunciaban el comienzo de los restos que la Guerra Civil Española dejó en el Parque Lineal del Manzanares.

Los senderistas escuchan las explicaciones del Gefrema sobre los restos, mientras contemplamos la tronera que aún vigila el valle del río Manzanares

En turnos ordenados, todos los asistentes pudieron acceder a los túneles defensivos de La Gavia. Visitar la tronera y sentir en primera persona la sensación de aquellos milicianos que empuñaron las armas para defender a la República. Nadie se resistió a la tentación ¡e incluso algunos repitieron!

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Continuando la marcha, y ascendiendo a los cerros para contemplar mejor las trincheras y elementos defensivos que se instalaron en las alturas de los Cantiles del Manzanares, proseguimos viaje, caminando tras los pasos de la historia. Así llegamos a la Casa del Yeso, centro defensivo que guardaba un puesto de mando, probablemente a nivel de batallón, de la Cuarta División del Ejército Popular de la República. De nuevo más trincheras, túneles y los restos de una construcción que aunque fue usada en la Guerra Civil, databa de la época del Real Canal del Manzanares en el siglo XVIII. De nuevo también las pertinentes explicaciones de los expertos del Grupo de Estudios del Frente de Madrid, quienes nos ceden incluso el placer de dar unas pequeñas palabras también a nivel de historia militar, desde luego mucho más modestamente.

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En este punto acaba la ruta y ahora toca volver al local del Espinillo, donde nos espera el ágape que Gefrema nos ha preparado, y de nuevo la exposición que con tanta ilusión hemos creado entre todos.

Nuestro agradecimiento

Desde estas lineas queremos agradecer al Gefrema la edición del libro que describe la ruta y la historia de la Guerra Civil en el Parque Lineal, y os animamos a poneros en contacto con ellos para la adquisición de esta publicación. Así mismo les agradecemos la organización de la ruta y las facilidades puestas en la colaboración que juntos hemos ejecutado espléndidamente.

Agradecemos también enormemente el esfuerzo humano hecho por las personas de la Asociación de vecinos del Espinillo, quienes nos han apoyado en todo momento con su trabajo, ilusión y transparencia. Agradecemos también su apoyo en la cesión del local.

Y por supuesto, agradecemos muy especialmente el coraje puesto por todos los asistentes anónimos que han acudido hoy y el viernes a la cita. A las personas que entre pecho y espalda han encajado los quince kilómetros sin una sola queja. A los que han madrugado un domingo de elecciones. Con los que ha sido un placer conversar durante horas y compartir lo mejor de cada uno. A ellos va dedicada esta ruta porque ellos siguen escribiendo la historia del Parque Lineal del Manzanares.

Hoy hemos vivido un nuevo capítulo de esta historia que quizá sea un punto y aparte en su devenir. Hoy se sabe, se presiente, el Parque Lineal debe estar presente.

Fotografías de la ruta

Presentación de la ruta en Flickr